Tercera visita de Anathema a Chile, pero mi primera vez.
Llegué a un mar de poleras negras. La imagen angelical de Anneke Van Giersbergen literalmente iluminó todo. Blanca, rubia, con una túnica semitransparente. Linda, rica, simpática, encantadora y con una voz realmente impresionante. Tocó una hora. Entre piano, guitarra, tallas tiernas, fotos con su iphone, pasó Anneke por el Caupolicán cuando muchos, aunque encantados con su presencia,
íbamos por otra cosa.
íbamos por otra cosa.
Luego se vino una larga espera. Sólo un roadie preparaba los instrumentos de Anathema.
Apagan las luces y aparecen. Comienzan con Thin Air, de We’re Here Because We’re Here. Nos mataron a la primera. Ese pulso ascendente, de inmediato fue mágico. Si algo sabe Anathema es crear atmósfera y la del último disco tiene una cualidad esperanzadora y sobrecogedora que no nos esperábamos quienes nos quedamos en el A Natural Disaster.
Yo los abandoné cuando el Judgement y el Eternity eran el emblema de mis días oscuros,
cuando migré hacia mundos más felices y quizás más triviales.
Yo los abandoné cuando el Judgement y el Eternity eran el emblema de mis días oscuros,
cuando migré hacia mundos más felices y quizás más triviales.
Es realmente conmovedor encontrarse con una banda antigua y escucharla así. Inspiradora, positiva. Justo lo que necesito.
Nos dejan arriba, el saludo afectuoso y siguen con Summernight Horizon, prendida. Luego, el mega single del disco. Dreaming Light. El Caupolicán en silencio, el piano, la voz y la expresión de Vincent Cavanagh. Realmente conmovedor y emotivo. Muchos nos quedamos prendados. No supe de mí, no estaba en un concierto. Estaba ahí, porque estaba ahí.
Saludan al Chile que los quiere tanto, chi chi chi le le le, dicen reconocer caras y le insisten al “señor de la luz” que las deje arriba para mirarnos.
Les gusta vernos felices y sobre todo saltando. Así que siguen con un hit: Deep.
Les gusta vernos felices y sobre todo saltando. Así que siguen con un hit: Deep.
El resto del concierto se compone de temas nuevos y antiguos. Flying es gritada por todos a viva voz. Y de pronto nos tiran al antiguo Anathema, “para todos quienes han perdido un ser querido”: One Last Goodbye. Acúsenme de lo que sea pero se me nubló la vista y un poco lloré. Esa canción se siente dentro y rememora tanto. Con ellos al frente, con el bajo en la guata, reviví todas las angustias que esa canción acompañó. Con una mezcla de pena por lo que la canción es
y por el recuerdo de haberme sentido así.
y por el recuerdo de haberme sentido así.
Después, Lost Control. Estos quieren matarnos de pena. Por dios que se sienten.
Con el alma colgando nos dejan en un encore inolvidable. Daniel nos regala una versión de Are You There sólo con su guitarra electroacústica. Invita a pasar a Anneke para un cover de Damien Rice, The Blower’s Daughter. Una canción muy simple y linda conocida por ser la única banda sonora de la película Closer. Varios poleras negras del público se incomodan.
Vuelven y nos dan en el gusto con temas antiguos que confiesan ya no tocar. Nos aman, eso se nota. Angelica, qué linda y que antigua Angélica. Después el mega hit de todos los tiempos, A Natural Disaster. Lindo escucharla de ellos después de tantos guitarreos aficionados.
Finalmente Fragile Dreams para dejarnos prendidos.
Finalmente Fragile Dreams para dejarnos prendidos.
Se despiden contentísimos, con la bandera de Chile. Todos en el escenario con Anneke,
como los amigos más cool del mundo.
Prometen volver pronto, después del próximo disco que sale en septiembre.
como los amigos más cool del mundo.
Prometen volver pronto, después del próximo disco que sale en septiembre.
Las luces prendidas, la música empaquetada para echar a la masa. Caminando como pingüinos hacia la salida y todo eso.
En la casa, en la cama, el concierto pega. Ahí remata.
Toda esa emoción dentro, todos los temas con otro valor.
Sí, es solo un concierto. Pero uno como este no lo olvido y por dios que he ido a varios. Este se me quedó dentro. No es para menos, Anathema me ha regalado los temas más emotivos de mi historia. Ahora, verlos y escucharlos del otro lado, de la luz, fue realmente motivante e inspirador.
Es una banda que ha crecido con uno.
Es una banda que ha crecido con uno.
Dreaming Light no me deja dormir. No encuentro palabras para describir los que esa canción me provoca. Finalmente no era coincidencia que la sensación encantadora se parezca tanto a la que alguna vez me provocó Sigur Ros. Resulta que para los Cavanagh se ha convertido en una gran influencia. De todos modos, lejos de eso. El mérito es propio. Anathema es capaz de remecer el corazón y ahora lo logran en otro sentido completamente distinto al que conocía.
Con esa canción siento ganas de todo. Me siento aquí y ahora.
Con esa canción siento ganas de todo. Me siento aquí y ahora.
Así como van, no me separo más, nunca más.
A continuación algunos links,
Sesión acústica en la radio Futuro:
El setlist completo:
http://www.setlist.fm/setlist/anathema/2011/teatro-caupolican-santiago-chile-4bd09f4e.html
Cámaritas amigas:
Thin Air
http://www.youtube.com/watch?v=07JqtWakjyQ
Everything
http://www.youtube.com/watch?v=b27yi8hDYVs
One Last Goodbye
http://www.youtube.com/watch?v=Ny9VMg_fV1I
3 Atmósferas.:
Si, q onda dreaming lights?...
También me recordó a ratos este último disco
esos estados parecidos de Nirvana momentáneos
q t dá Sigur Ros...
...Tan gratuita y fácilmente.
La dinámica o mas bien la evolución
de esta banda, me impacto el músculo auditivo.
Después del Hindsight que es medio acústico
pensé que ya no se iban a salir de eso.
Pero, bien! Como dices tú. No los suelto más.
tenia k leer esto con la musica golpeandome los oidos, por ahi pille unos de buena calidad, y te odie un poco por haber ido jaja
en fin espero k se cumpla eso de volver luego, k los kiero ver si o si, el año pasado cuando salio este We’re Here Because We’re Here, me habia prometido ir si venian y no cumpli, ahora, ya es un deber.
muy buena entrada.
buen aporte viejaa!!
ta buenisima la banda
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